Deshumanización en la atención de la salud ¿son las Tic ́s el problema o la solución?
Dehumanization in health care are ict's the problem or the solution
 aLuís A. Jiménez- Rodríguez, bRamiro Gamboa-Suárez, cMarco Márquez
                    
 a PhD. Ciencias Generales, lualf0115@gmail.com, Orcid:0000-0001-8656-9406,
                    
 Docente- Investigador. Universidad Nacional Abierta y a Distancia, 
                    
 Universidad Francisco de Paula Santander de Ocaña 
                    
 Fundación de Estudios Superiores Comfanorte, Ocaña, Colombia 
                    
 b PhD. Ciencias Generales, rgamboa1@uniminuto.edu.co, Orcid: 0000-0002-5727-6409,
                    
 Docente-investigador Corporación Universitaria minuto de Dios, Bogotá, Colombia
                    
 cDocente investigador, marco.marquez@unad.edu.co, Orcid: 0000-0002-4181-8963
                    
 Universidad Nacional Abierta y A distancia UNAD, Bogotá, Colombia       
                
            
                
                Recibido: 8 de Febrero de 2018 Aceptado: 20 de Mayo de 2018
 Forma de citar: L. Jiménez, R. Gamboa y M. Márquez, “Deshumanización en la atención de la salud ¿son las Tic ́s el problema o la solución?”,     
                
 Mundo Fesc, vol. 9, no. 17 pp.  76-84, 2019 
            Resumen
Este artículo analiza la deshumanización como resultado de la interacción del binomio paciente-médico y el intrincado campo real que en la actualidad sobreviene a la innovación y la tecnología que es fundamental hoy. Como premisa, se identifican las causas gestoras de la deshumanización en entornos médicos (alteración de la agencia del paciente, mecanización, reducción de la empatía y desconexión moral). Posteriormente, propondremos posibles soluciones tales como (individuación, reorientación de la agenda, promoción de la similitud, personificación y procedimientos de humanización, balance empático y selección de personal médico y paramédico y compromiso moral). Como colofón al esbozo teórico disertamos cuando este proceso deshumanizante en la situación de la salud en potencialmente tocado por la Tic ́s o si por el contrario no poseen efecto alguno dentro de su actuar. El estudio se basa en la interpretación e sendos documentos que en definitiva apoyaron el resultado, estos son fuente de investigaciones y posturas reales recogidas en el desarrollo.
Palabras claves: Deshumanización, Empatía, Paciente, Tic ́s.
Abstract
This article analyzes dehumanization as a result of the interaction of the patient-doctor binomial and the intricate real field that nowadays comes to the innovation and technology that is fundamental today. As a premise, the management causes of dehumanization in medical environments are identified (alteration of the patient's agency, mechanization, reduction of empathy and moral disconnection). Later, we will propose possible solutions such as (individuation, reorientation of the agenda, promotion of similarity, personification and humanization procedures, empathic balance and selection of medical and paramedical personnel and moral commitment). As a culmination to the theoretical outline we discuss when this dehumanizing process in the health situation in potentially touched by the Tic ́s or if on the contrary they have no effect whatsoever within their actions. The study is based on the interpretation of both documents that ultimately supported the result, these are sources of research and real positions collected in the development.
Keywords: Dehumanization, Empathy, Patient, Tic's.
Introduccion
 En su génesis la relación paciente-galeno, siempre ha   sido   entendida   como   aquella   oportunidad   donde  coloquialmente  se  le  cuenta  al  tratante  sobre  las  falencias  en  términos  de  salud,  esto  no  es  un  secreto.  De  este  encuentro  se  espera,  que  aquel  especialista  cubra  con  su  sapiencia  y  conocimiento el área problemática y sea capaz de brindar  calidad  de  vida  mediante  el  tratamiento  asignado. Lo anterior en contexto normal siempre se  ha  efectuado  mediante  el  auscultamiento  y  la  práctica  de  la  comunicación  directa  como  único  medio  que  permite  al  paciente  sentir  ese  aporte  hacia su franca mejora, es pues la práctica galena por tradición. Ahora bien, por desfortuna nuestra medicina  occidental  que  difiere  tangencialmente  de  la  oriental  que  es  milenaria,  más  naturalista  y  menos  alquimista,  se  ha  caracterizado  por  ser  antes que preventiva curativa, esto es el entendido entonces   que   acudimos   por   tradición   cuando   existe el fallo. 
                    
 
 Siempre  el  proceso  dual  de  interacción  se  ha  gestado mediante el aporte obvio del médico como conocedor  y  del  paciente  como  aportante  pasivo  hacia la solución, siendo este último quien provee el insumo informativo claro y a veces preciso para que  el  tratante  defina  la  anomalía.  Este  contexto  ha de presumir el proceso vivo de la comunicación necesario  para  que  se  cree  la  confianza  y  el  especialista  se  comprometa  radicalmente  hacia  el  cumplimiento  de  su  juramento  hipocrático.  En  vista de los criterios anteriores, vemos como hoy, si  bien  se  trata  de  seguir  la  línea  tradicional  de  atención,  la  misma  interacción  ha  cambiado  y  se  sustenta por fortuna o desfortuna la comunicación directa que a nuestro juicio profesa y promueve el toque  sutil  e  importante  de  la  humanización  del  servicio  de  salud,  con  el  uso  de  las  Tic ́s,  como  elemento  complementario  y  definitivo  hacia  la  solución en salud. 
                    
 
 En   tal   sentido,   el   uso   de   las   tecnologías   de   información  y  comunicación  Tic ́s,  comienza  de  manera  predecible  con  una  imagen  que  refleja  tanto  nuestros  temores  como  nuestra  fascinación  por la computadora y su impacto social, por ello un caso que se trae a colación es cuando un paciente semiconsciente  se  encuentra  en  una  unidad  de  cuidados intensivos, tubos que sobresalen, cables que salen de debajo de las sábanas y se conectan a  una  gran  cantidad  de  carros  de  monitores  o  dispositivos  montados  en  la  pared,  y  líquidos  intravenosos con bombas de infusión controladas por computadora que giran alrededor de la cama.
                    
 
 Los  silbidos  de  los  monitores  no  se  interrumpen  por  las  pisadas  de  los  cuidadores,  ya  que  rara  vez  tienen  que  entrar  en  la  sala.  En  su  lugar,  los   dispositivos   inteligentes   miden   todos   los   parámetros  fisiológicos  pertinentes,  decidiendo  cómo ajustar las velocidades de infusión, cuándo modificar  los  ajustes  del  respirador  y  si  sonar  las  alarmas  para  la  intervención  de  enfermeras  o  médicos. 
                    
 El  mensaje  es  claro:  estamos  entrando  en  una  era  de  terapia  controlada  por  Tic ́s    que  abrirá  una  brecha  entre  los  médicos  y  los  pacientes,  ofreciendo  atención  potencialmente  competente  pero  estéril,  impersonal  y  deshumanizadora.  Por  lo tanto, es hora de cuestionar el supuesto común de  que  el  uso  creciente  de  Tic ́s  necesariamente  deshumanizará  la  atención  médica.  El  accionar  actual de la sociedad muestra serios y fehacientes indicios de que en pro de la salud se aceptan otros escenarios  incluidos  el  aporte  definitivo  de  las  Tic ́s, como solución antes que problema. 
                    
 Vemos  trazado  un  futuro  con  una  variedad  de  aparatos  que  de  hecho  podrían  permitir  que  la  medicina  se  practique  con  la  mínima  imposición  de  manos.  Sin  embargo,  la  representación  de  los  profesionales  de  la  salud  en  este  programa  no  es  fría  o  impersonal,  A  pesar  de  las  maravillas  tecnológicas  que  se  imaginan.  Más  bien,  vemos  en el siglo pasado, a médicos y enfermeras como personas  amables  y  cariñosas  que  hablan  con  los  pacientes,  que  tomaban  las  manos  en  momentos  de necesidad y brindaban precisamente el tipo de comodidad  y  apoyo  que  prevemos  que  estaban  ampliamente   disponibles,   e   hicieron   visitas   a   domicilio  hace  medio  siglo  de  allí  que  se  le  entendía  y  aceptaba  al  galeno  como  y  garante  de  vida  y  ante  todo  el  aliado  ante  las  vicisitudes  propias del ser humano en salud. Por tal razón nace esta  pregunta  ¿Estamos  viendo  valores  del  siglo  XXI proyectados de forma irreal en el futuro, o es posible que la mera introducción de tecnología no tenga un efecto deshumanizante en las relaciones entre los pacientes y sus cuidadores?
                    
 Por  tal  motivo,  la  humanización  de  los  servicios  hospitalarios   implica   en   primera   medida   que   los   profesionales   de   la   salud   como   médicos,   enfermeras,  personal  de  recepción  y  facturación  brinden un servicio de calidad a los pacientes que lo requieran, y así mismo se respeten sus derechos, deberes,  creencias  el  derecho  a  recibir  un  trato  digno.
                    
 En    ese    orden,    según    [1]    las    instituciones    hospitalarias,    son    subsistemas    sociales    que    cumplen la función de socializar a los individuos con  pautas,  normas  establecidas,  adaptándolos  e  integrándolos  al  sistema  con  la  finalidad  de  que  cumplan  sus  roles  establecidos  a  través  de  un  control  social,  con  el  objetivo  de  mantener  el  sistema  social  imperturbable.  Por  consiguiente,  diversos  son  los  factores  que  influyen  en  que  el  trato al paciente no sea de calidad el cien por ciento de  las  veces,  lo  que  hace  necesario  la  empatía  y  personalización  de  la  atención  del  paciente,  al  igual  que  una  infraestructura  adecuada  para  la  recepción de pacientes en los centros hospitalarios, de allí, que en nuestra regiones que son alejadas de las ciudades capitales de Colombia aún persiste la ausencia estatal de garantías frente al derecho a la salud  para  los  ciudadanos,  prueba  de  ello  es  que  las personas deben trasladarse a otros municipios aledaños para recibir la atención médica necesaria, o el hecho de que cuentan con centro de salud pero no cuenta con el personal ni los equipos necesarios para la atención de los pacientes, o en el peor de los casos,  el  personal  que  labora  en  las  instituciones  no  es  suficiente  para  cubrir  con  la  demanda  de  usuarios.
                    
 Entonces,   se   manifiesta   la   deshumanización   de  los  servicios  hospitalarios  en  la  sobre  carga  laboral  que  radica  en  el  personal  de  salud,  pero  en  especial  en  el  personal  de  enfermería  y  los  médicos  de  servicios  de  urgencias,  en  ese  orden,  hay  una  mayor  incidencia  en  la  población  de  enfermería quienes tienen a su cargo la ejecución de las ordenes Medicas, procedimientos, cuidado y atención integral del paciente.
                    
 Si bien es cierto, el termino Humanización es algo que incluye al todo el equipo de salud, vale la pena aclarar que el contacto o la interacción que tienen médicos  y  terapeutas  con  el  paciente  no  es  igual  al  tiempo  que  dedica  el  personal  de  enfermería.  De  acuerdo  a    [2]    en  el  medio  hospitalario  el  ingreso  de  pacientes  es  algo  rutinario;  por  lo  tanto,  el  personal  de  salud  no  brinda  el  tiempo,  ni  las  explicaciones  suficientes  a  la  persona  que  por  primera  vez  llega  a  una  institución  de  salud.  Entonces,  se  presenta  el  fenómeno  del  Hospital  Deshumanizado que se vive en todo el mundo.Sin embargo,  aunque  la  investigación  ha  observado  una amplia gama de problemas, como los factores que   contribuyen   a   la   deshumanización   y   sus   consecuencias  e  implicaciones,  poco  se  ha  hecho  en el área de las interacciones médicas [3].
                    
 Por  lo  tanto,  la  deshumanización  puede  ocurrir  por  razones  diferentes  a  la  motivación  de  los  profesionales  de  salud  para  resolver  problemas  de   trabajo.   Sin   embargo,   [4]      identificaron   causas  funcionales  de  la  deshumanización  del  paciente.  Uno  está  relacionado  con  la  resolución  de   problemas   clínicos:   tratar   a   los   pacientes   como  sistemas  mecánicos  y  concentrarse  en  una  parte  del  cuerpo,  sin  considerar  el  organismo  completo  y  los  estados  mentales  del  paciente,  puede  favorecer  el  diagnóstico  y  la  localización  patológica.  La  mecanización  puede  facilitar  la  resolución  de  problemas  clínicos.  Por  otro  lado,  la   deshumanización   es   una   forma   adaptativa   de  lidiar  con  el  estrés  laboral  de  los  cuidadores  asistenciales, así mismo, se ha encontrado que las actitudes y creencias implícitas se manifiestan no en comportamientos verbales sino en no verbales, por  ejemplo,  distancia  de  interacción,  contacto  visual   y   paraverbal   por   ejemplo,   velocidad   y   tono  del  habla,  que  pueden  transmitir  rechazo  y  prejuicios  a  los  pacientes.  Por  ejemplo,  en  las  interacciones  médicas  discordantes,  los  médicos  con mayor sesgo implícito muestran más dominio verbal que los médicos con menor sesgo implícito (es   decir,   hablan   más   que   sus   pacientes).   El   dominio verbal está asociado con un sesgo racial implícito, pero no explícito [5].
                    
 Podemos     aplicar     estos     hallazgos     a     la     deshumanización  del  paciente.  La  atribución  de  un estado humano más bajo a los pacientes es un efecto  en  gran  medida  inconsciente,  evaluado  a  través de medidas sutiles.
                    
 El  término  "deshumanización",  que  equivale  a  "bestializar,   no   tener   estima,   exclusión   social   y   ostracismo"   en   la   literatura   científica,   así   mismo,   no   ha   recibido   mucha   atención   en   publicaciones  científicas  en  Colombia.  Por  ello,  la   deshumanización   como   un   fenómeno   que   emerge  en  las  relaciones  entre  el  personal  del  sector  de  servicios  de  salud,  especialmente  los  médicos  y  enfermeras,  y  los  pacientes,  en  este  sentido,  el  objetivo  de  este  estudio  es  examinar  la  deshumanización  en  el  contexto  de  la  ética  empresarial  en  el  sector  de  servicios  de  salud;  donde se pretende enfatizar por qué ha emergido, sin  acusar  a  un  sector  o  vocación.  Se  adopta  un  enfoque  deductivo  para  identificar  los  efectos  positivos y negativos y contribuir a la discusión de este  problema  ofreciendo  recomendaciones  para  eliminar  las  acciones  negativas.  Las  últimas  dos  décadas  han  visto  cambios  notables  en  relación  con el papel y la aceptación de las computadoras en nuestra sociedad [6].
                    
 Hoy en día, pocos pacientes cuestionarán el lugar lógico  de  la  tecnología  de  la  información  para  ayudar a los médicos y enfermeras que los cuidan. La revolución de las TIC ́s y el posterior desarrollo del software de gestión de oficina y de línea, han hecho que sea raro encontrar una práctica médica sin una automatización en su lugar. Sin embargo, el número de profesionales de la salud e instituciones médicas  que  usan  las  Tic ́s  para  brindar  atención  clínica siguen aumentando.
                    
 Hay dos aspectos de la deshumanización, a saber, el "deshumanizador" y "deshumanizado". También hay dos aspectos, la "actitud de deshumanización" y  la  "percepción  de  deshumanización".  Desde  la  perspectiva  del  sector  de  los  servicios  de  salud,  la  actitud  de  deshumanización  se  refiere  a  la  actitud  consciente  o  inconsciente.  del  personal  sanitario   hacia   un   paciente,   la   percepción   de   deshumanización  se  refiere  a  los  sentimientos  de  los pacientes de que dicha actitud se dirige hacia ellos,  independientemente  de  si  se  ha  producido  o  no.  La  expresión  "deshumanización"  como  una  actitud se refiere a la negación parcial o total de una persona de las características humanísticas de una persona o grupo corresponsal [7].   El concepto de deshumanización se investigó como un factor que legitima  los  actos  de  violencia  emergente  entre  individuos o grupos [8].
                    
 A   través   de   sus   actitudes   deshumanizadoras,   quienes  dirigen  actos  de  violencia  hacia  otros  niegan   las   identidades   humanitarias   de   esas   personas.    Estas    actitudes    se    basan    en    las    diferencias  percibidas  entre  ellas  y  sus  víctimas,  y  los  actos  de  violencia  se  llevan  a  cabo  a  través  de un sentimiento de compasión disminuido hacia las  víctimas.  Por  consiguiente,  hasta  la  década  de  2000,  el  término  "deshumanización"  se  usaba  para    explicar    acciones    moralmente    intensas    como  la  violencia  y  los  crímenes  de  guerra.  Más  recientemente,  se  utiliza  para  investigar  las  relaciones en la vida empresarial y se ha convertido en un área de enfoque clave para los investigadores de  ética  empresarial.  Además,  las  solicitudes  de  investigación  científica  han  aumentado  [9].  En  la  actualidad,  se  llevan  a  cabo  un  número  creciente  de  estudios  en  el  sector  de  servicios  de  salud,  en  los que la ética empresarial es vital [4].  
                
Materiales y Métodos
 La  recopilación  de  datos  y  el  uso  de  las  fuentes  de primaria se obtuvieron bajo el uso del método hermenéutico que permite el análisis: 
                    
 e  interpretación  de  textos  y  documentos.  Para  este  escrito  se  hizo  la  búsqueda  en  las  bases  de  datos Dialnet, Scielo, ProQuest, Bireme, Elsevier, ScienceDirect Pubmed y Latindex con las palabrashumanización,   deshumanización,   acto   médico,   formación   médica,   enfermería,   ética,   bioética,   medicina; se utilizaron diversas combinaciones de estas con el conector “Y”. La búsqueda se amplió utilizando  los  términos  en  inglés:  Humanization,  dehumanization,  medical  act,  medical  training,  nursing,   ethics,   medicine.   Se   incluyeron   los   artículos  que  estuvieran  en  texto  completo,  se  descartaron los editoriales y las cartas al editor y se  tomó  como  período  de  búsqueda  desde  el  año  2006 al 2018, dando prioridad a los artículos más recientes.
                    
 Además,     se     acudió     a     estudios     previos     investigativos  como  gestión  de  valoración  como  estrategia  de  reconocimiento  laboral  del  talento  clave  en  empresas  sociales  del  Estado.  (E.S.E.),  Estudio  de  caso  “Felicidad  organizacional  como  determinante de la productividad en la IPS Clínica Nuestra  señora  de  Torcoroma  y  Percepción  de  la  humanización en la prestación de los servicios de salud, una mirada desde la ética  [10] trabajos que ayudaron  a  la  orientación  y  una  perspectiva  más  objetiva del presente constructo por estar presente al contexto real. 
                
Definiciones y conceptos
 Deshumanización:   Es   la   negación   de   rasgos   humanos  únicos  (que  involucran  lógica,  razón  y  civilidad) o rasgos típicos de la naturaleza humana que  involucra  emoción  y  calidez  interpersonal;  [11], [12]. 
                    
 Paciente:  Según  [13]  el  paciente  se  define  como:  La  persona  que  recibe  atención  sanitaria,  y  a  la  atención sanitaria como los servicios que reciben las  personas  o  las  comunidades  para  promover,  mantener, vigilar o restablecer la salud. Se utiliza el término paciente en lugar de cliente, residente o consumidor, si bien se admite que es posible que muchos  receptores  de  atención  sanitaria,  como  una embarazada sana o un niño al que se vacuna, no  sean  considerados  pacientes  o  no  se  vean  a  sí  mismos como tales. La atención sanitaria incluye el cuidado de la salud por uno mismo. 
                    
 Trato: El Centro de Estudios y desarrollo estableció, mediante una serie de encuestas y análisis que “sus ideas (pacientes) son consecuentes al señalar que en el momento que se contactan con el personal de  salud  y  administrativo  que  los  atienden  se  activan  otros  conceptos,  algunos  de  ellos,  más  concretos  que  sustentan  el  significado  de  ser  tratados  como  persona,  los  cuales  se  asocian  a  que  éstos:  miren,  escuchen,  saluden,  tengan  en  consideración su opinión, sean cordiales e, incluso, cariñosos [14].  
                
Resultados y Análisis
Se encontró una amplia gama de artículos pertenecientes a la humanización y deshumanización en los servicios de salud evaluando la variable Tic ́s. Las fuentes encontradas fueron evaluadas en cuanto a su aporte para la caracterización del tema, siendo importante la gesta real de cada documento en su contenido y el aporte serio al constructo propuesto.
Figura 1. Revisión de artículos eficaces en distintas bases de datos
Se obtuvieron un total de 21 artículos de 10 países en distintos continentes, de los cuales 9 eran estudios cuantitativos, 7 estudios cualitativos, 1 estudio mixto, 4 revisiones de la literatura. Todos ellos fueron analizados críticamente por los autores buscando establecer los factores de evaluación que podrían llevar a la incidencia de las Tic ́s para determinar la deshumanización en los servicios de salud.
Tipos y dimensiones de la deshumanización
 
                    La   actitud   de   deshumanización   se   puede   ver   de   dos   maneras   según   [11]   el   primero   es   la   deshumanización  animal,  la  actitud  de  negar  las  características  que  distinguen  a  las  personas  de  los  animales,  como  la  alta  capacidad  cognitiva,  la  amabilidad  y  la  sensibilidad  ética.  El  segundo  es  la  deshumanización  mecanicista,  la  actitud  de  negar  las  características  que  distinguen  a  las  personas  de  los  seres  no  vivos,  como  los  robots.  Estas características incluyen la agencia vital y las emociones
                    
 Alineado  a  este  modelo  dual,  que  numerosos  estudios    respaldan,    el    acto    de    ver    a    los    corresponsales  como  animales  en  la  violencia  de  masas.  Las  acciones  pueden  ser  descritas  como  deshumanización animal. Además, el acto de ver a los corresponsales en el campo de la tecnología y la medicina como frío, pasivo y mecánico, y no ver ninguna  diferencia  cualitativa  entre  ellos,  puede  ser  descrito  como  deshumanización  mecanicista  [8], [11].
                    
 Además,     los     investigadores     señalan     dos     dimensiones   de   la   deshumanización.   En   la   dimensión  vertical,  el  corresponsal  se  califica  como  "bajo"  o  "alto"  en  términos  de  intimidad  emocional  (calidez)  para  el  actor  y  logros  en  relación  con  los  indicadores  materiales  [15],  así  mismo estos autores encontraron que las personas excluyen  y  deshumanizan  a  los  corresponsales  clasificados en el extremo más bajo de esta escala vertical, que se basa en la calidez y la competencia. En  la  dimensión  horizontal,  la  distancia  entre  el  usuario  (paciente)  y  el  actor  (profesionales  de  la  salud)  y  la  ausencia  de  relaciones  entre  ellos  son  efectivas.  Este  tipo  de  deshumanización  es  evidente  en  el  sector  de  servicios  de  salud  [8].  El  personal  de  salud  se  aleja  emocionalmente  del  dolor  de  los  pacientes  y,  al  hacerlo,  niega  sus  características humanitarias como la agencia vital o las emociones [3].
                    
 En ese sentido, las razones organizacionales   son   parte   de   la   deshumanización   y   puede   atribuirse   a   las   características   de   un   hospital   como   organización.   La   primera   característica   es   la   cultura   organizacional   del   hospital.   La   cultura  organizacional  se  define  como  el  cuerpo  de   valores,   creencias   y   acciones   comunes   de   los  miembros  de  la  organización  que  lideran  su  conducta  [16].  Como  una  pirámide,  los  impactos  de la cultura organizacional emergen en tres capas de arriba a abajo [17].   
                
Elementos visibles tales como rituales, lenguaje, elementos físicos, comportamientos observados
Valores y objetivos desposeídos relacionados con lo correcto / incorrecto y bueno / malo;
Supuestos y creencias subyacentes que constituyen el inconsciente.
En una entidad prestadora de servicios de salud (EPS-IPS-ESE CENTRO MEDICO etc.), estas tres capas de cultura organizacional pueden afectar la deshumanización de los pacientes, Pero, veamos cómo cada una aporta al proceso desde su arista y contribuye al escalonamiento del proceso deshumanizados en salud:
Lenguaje: Las palabras, los conceptos, los modismos y los estilos preferidos con respecto al habla en el lugar de trabajo pueden hacer posible la deshumanización de los corresponsales al afectar los procesos emocionales relacionados con las evaluaciones éticas de las personas. El lenguaje utilizado en las organizaciones comúnmente oculta el contenido ético de las decisiones y comportamientos, crea puntos ciegos éticos y causa decisiones morales inapropiadas [18].
Elementos físicos: Los pacientes y el personal pueden ser deshumanizados a través del diseño arquitectónico interior y exterior de los hospitales, el diseño, las medidas, los muebles preferidos (o no preferidos), la decoración, la selección de colores, las inscripciones, los signos y símbolos en el edificio, los uniformes del personal de salud y la ropa de los pacientes (por ejemplo, ropa que revela cualquier parte del cuerpo) [4].
Comportamientos observados: De acuerdo con la teoría del aprendizaje social, las personas aprenden a través del modelado de comportamientos observados de otros para generar comportamientos complejos. En las organizaciones, los comportamientos observados de los líderes/ gerentes y colegas en el grupo modifican las decisiones éticas y los comportamientos de los empleados que no tienen una identidad ética sólida [19].
Valores y objetivos desposeídos: Muchas organizaciones encarnan este elemento como misión, visión, valores y el código ético más reciente en documentos compartidos con los trabajadores y el público. Sin embargo, lo que importa no es el acto de compartirlos con los trabajadores, sino que los trabajadores compartan estos valores y objetivos. En Colombia, casi ninguna de las instituciones de salud tiene un código ético privado. Posiblemente, esto se debe a que, debido a la naturaleza muy ética de su trabajo, los grupos ocupacionales de servicios de salud tienen códigos éticos profesionales vinculantes. Sin embargo, es importante saber cuánto tienen estos códigos en la cultura organizacional. Un estudio encontró que incluso el personal de salud que prepara un código ético para sus propias instituciones no lo adopta [20].
Supuestos y creencias subyacentes: Este elemento generalmente está conformado por el fundador o líder y es adoptado por quienes participan en la organización durante el período de socialización [17]. Este elemento, en la parte inferior de la pirámide de la cultura organizacional, no se ve, sino que se siente. Además, tiene el mayor impacto en la deshumanización. Hoy en día, a menos que el enfoque filosófico dominante en la mayoría de los segmentos del sector de la salud que se centra en enfermedades o incluso los médicos [21] se abandonan y se adopta el enfoque centrado en el paciente, no parece posible que los pacientes estén libres de deshumanización.
 Gestión  del  desempeño:  
                    en  entornos  donde  los  sistemas  de  desempeño  solo  incluyen  objetivos  cuantitativos,   las   personas   instrumentalizan   a   los  corresponsales  al  ignorar  sus  características  humanitarias   para   alcanzar   sus   objetivos.   A   medida  que  aumenta  el  poder  que  tienen,  esta  acción se practica cada vez más [22].  Los objetivos cuantitativos  crean  la  presión  del  rendimiento,  y  esto  se  siente  especialmente  en  las  instituciones  prestadoras de salud privadas en Colombia.
                    
 De  acuerdo  a  lo  anterior,  unas  de  la  causales  que  fracturan  la  humanización  en  los  servicios  de  salud  es  la  competencia  de  comunicación,  es  decir; la capacidad  que tiene un comunicador para desempeñar   asertiva,   efectiva   y   afectivamente   una  actividad  comunicacional  de  acuerdo  con  un  estándar;  aplicando los conocimientos, destrezas, actitudes   y   valores   que   posee,   escuchando,   corroborando y simpatizando con su interlocutor, de allí que la mayoría de las PQRF en los servicios de  salud  es  la  relación  paciente-profesional  de  salud,  debido  a  su  simbiosis  con  la  tecnología  por  parte  del  personal  medico  y  paramédico,  por  consiguiente,  El  humanismo  médico  no  es  un  lujo,  ni  un  refinamiento  para  estudiosos;  es  un  camino  para  huir  del  pragmatismo  puro,  del  empobrecimiento intelectual a que puede conducir el desarrollo incesante de las técnicas y el peligro de llevar los medios a rangos de fines, [23].  
                    
 No   obstante,   para   mejorar   esos   juicios   de   deshumanización   debe   existir   un   proceso   de   comunicación  donde  el  saludo,  la  presentación  dentro del proceso completo del personal de salud, y la despedida confirma y mejora la relación con los  usuarios  de  salud,  así  mismo  que  espera  el  paciente:
                
 • Cero afán 
                    
 • Actitud Amistosa
                    
 • Comprensión y Empatía 
                    
 • Trato Justo
                    
 • Ofrecimiento de Alternativas
                    
 • Información Exacta
                    
 • Presentación Personal
                    
 • Sitio de trabajo Agradable
                    
 • Competitividad en su trabajo
                    
 • Reconocimiento-resarcimiento
                
                    Todo  lo  anterior,  conlleva  a  una  comunicación  Humana  excelente,  donde  se  genera  un  clima  de  colaboración  entre  los  actores  del  sistema,  se  desarrolla  compromiso  y  mejora  la  experiencia  del paciente, por ello para la atención en salud, no basta con saber hablar sino que exista asertividad y  efectividad  en  la  comunicación,  sensibilidad  y  afectividad  al  escuchar  y  simpatizar  con  el  paciente,  que  el  personal  medico  y  paramédico  sea  innovador  en  romper  barreras  y  promover  la  pasión  por  su  labor  se  establece  que  todo  ser  humano es un ser que siente, pero es habitual que en  el  ámbito  laboral  los  profesionales  dejen  de  lado  este  ámbito,  lo  que  trae  como  consecuencia  la  negación  y  el  ocultamiento  de  sus  emociones  como  técnicas  de  afrontamiento  de  los  servicios  de salud hospitalarios.
                    
 En  ese  sentido,  la  complejidad  de  la  habilidad  médica      actual      y      la      especialización      y      compartimentación del conocimiento han tendido a  diluir  el  valor  central  que  para  la  medicina  representa  la  relación  que  se  establece  cuando  el  paciente se encuentra con su médico. Por tal razón se  hace  necesario  retomar  el  papel  del  médico  frente  a  las  humanidades  y  la  Bioética  junto  con  la  consolidación  de  su  enseñanza  y  puesta  en  práctica en la clínica, ya que estas complementan el cientificismo con el humanismo, [24].  
                
Conclusiones
 
                En  definitiva,  los  estudios  y  nuestra  percepción  nos   llevan   a   considerar   que   efectivamente   la   cohesión    y    relación    paciente-medico    se    ha    alienanizado  por  el  uso  claro  necesario  de  las  Tic ́s. Por consiguiente, una tendencia hacia el uso de  diferentes  tecnologías  para  prestar  servicios  de  salud  que  ya  no  sólo  están  concentrados  en  los  diferentes  centros  hospitalarios,  y  hay  una  tendencia  hacia  el  uso  de  diferentes  tecnologías  para  prestar  servicios  de  salud  que  ya  no  sólo  están  concentrados  en  las  grandes  ciudades,  sino  que  se  abren  campo,  justamente  por  una  latente  necesidad,  en  ciudades  pequeñas  y  cada  vez  más  intervenciones enfocadas a zonas remotas del país.
                
 Si bien el rediseño del sistema de información para los  servicios  sanitarios  se  ha  vuelto  efectivos,  de  allí,  la  eSalud  es  la  aplicación  de  las  Tecnologías  de  Información  y  Comunicación  (Tic ́s)  en  el  diagnóstico, el seguimiento y la gestión de centros hospitalarios, pero esta herramienta a desconectado la  relación  humana  paciente/medico-enfermera,  por lo cual se pregunta: ¿está la deshumanización del paciente realmente presente en contextos Tic ́s del  personal  asistencial  de  salud?  La  evidencia  consistente indica que los profesionales de la salud asignan  a  los  pacientes  un  estatus  humano  más  bajo:  los  pacientes  son  percibidos  como  menos  caracterizados  que  los  médicos  y  enfermeras  por  rasgos humanos únicos, y están más representados en  términos  de  características  que  los  humanos  comparten  con  los  animales  que  en  términos  exclusivamente humanos. Así, los proveedores de atención  médica  asocian  la  enfermedad  con  una  menor  capacidad  de  racionalidad  y  autocontrol.  No hay evidencia de deshumanización mecanicista cuando   los   profesionales   médicos   evalúan   a   los  pacientes  como  una  categoría  e  indicando  científicamente  los  diagnósticos  con  las  Tic ́s,  y  no como casos individuales. 
                
 De tal manera, que el proceso de deshumanización está  ligado  al  desarrollo  del  ejercicio  médico  y  a  su transición por diferentes modelos y paradigmas en  los  que  se  van  sustituyendo  los  preceptos  del  imperativo  hipocrático  por  otros  dados  por  un  imperativo económico que propugna la eficiencia en  la  administración  de  los  servicios  de  salud.  Pero, ¿por qué los profesionales de atención médica deshumanizan  a  los  pacientes?  En  la  presente  contribución,  nos  centramos  particularmente  en  las  causas  funcionales  de  la  deshumanización  (para  las  causas  no  funcionales  y  las  estrategias  que  permiten  su  control,  [4].  Con  respecto  a  las  causas funcionales, la investigación ha encontrado constantemente  que,  entre  los  profesionales  de  la  salud,  la  deshumanización  del  paciente  puede  estar asociada con una menor percepción de estrés y agotamiento. 
                
 Por lo tanto, la deshumanización del paciente puede tener la función de reducir el estrés y el agotamiento emocional  que  se  derivan  de  las  sobrecargas  de  trabajo y la percepción de dolor físico y psicológico en otros, con efectos beneficiosos para el bienestar de  los  profesionales  de  la  salud  y  su  desempeño  en el trabajo. Sin embargo, como argumentamos, la  deshumanización  del  paciente  puede  afectar  la  comunicación  entre  el  médico  y  el  paciente  y  disminuir  la  satisfacción  de  los  pacientes  con  la  atención. 
                
 Las    percepciones    deshumanizantes    de    los    profesionales  de  la  salud  también  pueden  inducir  autoevaluaciones  negativas  en  los  pacientes,  con  el  efecto  de  una  determinación  más  débil  de  los  pacientes en el seguimiento de las recetas médicas, de  allí,  la  pérdida  del  concepto  de  integralidad  del  paciente  y  su  análisis  e  intervención  desde  un  determinante  únicamente  biológico  afectan  el  entendimiento de este, en sus aspectos humano y comportamental.
                
 Sin  menoscabo  a  la  necesidad  y  el  uso  de  la  innovación,  nos  parece  que  el  proceso  y  relación  en  salud  a  veces,  se  torna  contrario  al  juramento  hipocrático “Si este juramento cumpliere íntegro, viva  yo  feliz  y  recoja  los  frutos  de  mi  arte  y  sea  honrado por todos los hombres y por la más remota posteridad.  Pero  si  soy  transgresor  y  perjuro,  avéngame lo contrario. No por la acción voluntaria si no deshumanizante a la que ha traído el momento en  la  atención  de  los  profesionales  en  salud,  que  ven al paciente como una carga, una mercancía y un objeto dador de recursos económicos. 
               
Recomendaciones
 
                Se  pueden  tomar  medidas  a  nivel  individual,  organizativo  y  gubernamental  para  eliminar  los  impactos   negativos   sin   eliminar   los   impactos   positivos  de  la  deshumanización  en  el  sector  de  servicios  de  salud.Primero,  a  nivel  individual,  el  personal  de  salud  debe  usar  la  empatía  y  las  habilidades cognitivas de una manera equilibrada. Por ejemplo, los médicos deben suprimir la empatía para  asegurar  una  cirugía  exitosa;  sin  embargo,  deben demostrar altos niveles de empatía hacia los pacientes y los familiares de los pacientes durante los    exámenes.    Los    investigadores    describen    los  beneficios  del  aumento  de  la  empatía  y  la  disminución    deshumanización.    Se    evidenció    que  los  médicos  y  las  enfermeras  tenían  más  probabilidades  de  percibir  al  paciente  como  un  individuo,   aumentar   la   comunicación   con   el   paciente  y  aclarar  los  objetivos  de  atención  al  paciente.
                
 Además,  a  nivel  individual,  se  puede  mejorar  la  calidad  y  la  cantidad  de  comunicación  con  el  paciente.  Durante  la  atención  al  paciente,  las  visitas  o  antes  de  una  intervención,  el  personal  de  salud  debe  hacer  hincapié  en  la  obtención  de  información  personal  además  de  la  información  sobre la enfermedad sin estigmatización. Cuando los pacientes son atendidos como personas únicas y  no  solo  en  un  grupo  de  pacientes  similar,  se  sienten atendidos como una identidad individual. 
                
 Las percepciones de deshumanización       pueden   eliminarse   apoyando   a   los   pacientes,   especialmente    a    aquellos    con    enfermedades    crónicas  como  diabetes,  enfermedades  cardíacas,  reumatismo y esclerosis múltiple. Como tales, no se  deben  enfatizar  los  problemas  de  salud,  pero  se  debe  resaltar  su  importancia  en  un  mundo  de  vida más grande, y se debe alentar a los pacientes a recordar que tienen una historia de vida continua que incluye el pasado y el futuro, no solo una vida basada solo en la enfermedad. 
                
 Por   otro   lado,   el   acto   de   deshumanización   puede  disminuirse  dando  crédito  al  paciente  que  experimenta la enfermedad, tanto a los hallazgos del  médico  como  a  la  tecnología  relacionada  con  la  enfermedad,  sin  objetivarlos  y  ganando  su  participación en la toma de iniciativas de salud. Un enfoque integrador que incluya métodos médicos tradicionales,   complementarios   y   alternativos,   en  lugar  de  la  causalidad  por  reducción  en  el  diagnóstico  y  el  tratamiento  de  la  enfermedad,  puede  disminuir  la  deshumanización  mecanicista  del   sistema   actual.   Por   último,   el   Estado,   la   sociedad y la academia debe volver a la formación humana  de  los  integrantes  del  contexto  en  salud,  esto  nos  garantizaran  la  unión  perfecta  de  la  gestión humana y la tecnología, como fundamento hacia la vida digna y no monetaria o financiera.
               
Referencias
[1] M. Poblete-Troncoso y S. Valenzuela-Suazo, “Cuidado humanizado: un desafío para las enfermeras en los servicios hospitalarios” Acta Paul Enferm, vol.20, no.4, 499-503, 2007.
[2] I. C. Pabón-Silva, y O. C Cabrera, “La humanización en el cuidado de pacientes para lograr una atención de alta calidad, hospitalarios”. Universidad Mariana, 2007.
[3] J. Leyens. “La humanidad para siempre en la deshumanización médica”. Nueva York: En P. G. Bain, J. Vaes, y J.-Ph. Leyens (Eds.), pp. 167-185.
[4] O. S Haque, y A. Waytz, A “La deshumanización en la medicina: causas, soluciones y funciones”, Perspectivas sobre la ciencia psicológica, vol. 7, 176-186.
[5] N. Hagiwara, y R. Dent, “Comunicación médico-paciente durante interacciones médicas racialmente discordantes: limitaciones con los sistemas de codificación actuales”. TPM - Pruebas, Psicometría, Metodología en Psicología Aplicada, vol. 23, 511-529, 2016.
[6] C. Dunlop y R. Kling R,. “Informatización y controversia: conflictos de valores y elecciones sociales”. Boston: Prensa Académica, 1998.
[7] S. Oliver, “Deshumanización: percibir el cuerpo como (en) humano. En P. Kaufmann, H. Kuch, C. Neuhauser, y E. Webster (Eds.), Humillación, degradación, deshumanización: Se ha violado la dignidad humanaNueva York, Nueva York: Springer. S. pp. 85-97, 2011.
[8] N. Haslam, y S. Loughnan, “Deshumanización y revisión anual de la psicología”, vol. 65, no. 1, 399-423, 2014.
[9] L. K. Treviño, G. R. Weaver, y S. J. Reynolds, “La ética del comportamiento en las organizaciones: una revisión”. Revista de Gestión, vol. 32, 951-990, 2006.
[10] L. A. Jiménez-Rodríguez y R. Gamboa-Suarez Ramiro, “Percepción de la humanización en la prestación de los servicios de salud, una mirada desde la ética”, Journal Cim, vol. 6, no. 1, 330-341, 2018.
[12] N. Haslam, P. Bain, L. Douge,M. Lee, y B. Bastian, “Más humano que tú: atribuir la humanidad a uno mismo y a los demás”. Diario de la personalidad y la psicología social, vol. 89, 937-950, 2005
[13] Organización Mundial de la Salud. (2009). Marco conceptual de la clasificación internacional para la seguridad del paciente. [En línea]. Disponible en: http://www.who.int/ patientsafety/implementation/icps/icps_full_ report_es.p df%206.
[14] Departamento de Estudios y Desarrollo, 2013. ¿Qué es “trato digno” para los pacientes? Elementos que componen el trato digno. Disponible en http://www.supersalud.gob.cl/ difusion/665/articles9004_recurso_1.pdf
[15] L.T. Harris, y S.T. Fiske, “Deshumanizante lo más bajo de lo bajo: respuestas de neuroimagen a Extremidades extremas”. Ciencia psicológicas, vol. 17, 847- 853, 2006.
[16]]J.R. Schermerhorn, J.G. Hunt, J.G., Osborn, R. N., & M. Uhl-Bien, “Comportamiento organizacional”. Nueva Jersey: NJ: John Wiley & Sons, M., 2010.
[17] E.H. Schein, “Cultura organizacional y liderazgo”. San Francisco: CA: John Wiley & Sons, 2010.
[18] M.H. Bazerman, y A.E. Tenbrunsel, “Puntos ciegos: por qué no hacemos lo correcto y qué hacer al respecto”. Princeton: NJ: Princeton University Press, 2011.
[19] L.K. Treviño, N.A den Nieuwenboer, y J.J. KishGephart, “Comportamiento (no) ético en las organizaciones”. Revisión anual de psicología, vol. 65, 635-660, 2014.
[20] I.D. Montaya, y A. J Richard, “Un estudio comparativo de códigos de ética en establecimientos de salud y empresas energéticas”. Diario de ética empresarial, vol. 13, 713-717, 1994.
[21] J. Bensing, “Acortando distancias. Los mundos separados de la medicina basada en la evidencia y la medicina centrada en el paciente”. Educación del paciente y asesoramiento, vol. 39, 17-25, 2000.
[22] D.H. Gruenfeld, M. E. Inesi, J. C. Magee, y A. D. Galinsky, “El poder y la objetivación de los objetivos sociales”. Revista de Personalidad y Psicología Social, vol. 95, 111-127, 2008.
[23] Mazzei ES. 1971. Conferencia 18/6/71.
[24] R. Pérez-Tamayo “Humanismo y Medicina”. Rev Fac Med, vol. 53, no. 6, 38-43, 2010.